La oxitocina es una hormona clave en el proceso del parto y juega un papel fundamental en la activación y regulación de las contracciones uterinas. Producida de manera natural por el hipotálamo y liberada por la hipófisis, actúa directamente sobre el músculo del útero para iniciar y mantener el trabajo de parto. Sin su acción, las contracciones no tendrían la intensidad ni la coordinación necesarias para permitir el nacimiento.
Durante el embarazo, los niveles de oxitocina se mantienen relativamente bajos, pero conforme se acerca el momento del parto, el cuerpo aumenta gradualmente la sensibilidad del útero a esta hormona. Esto se debe a que se incrementa el número de receptores de oxitocina en el músculo uterino, preparando al cuerpo para iniciar el trabajo de parto de forma eficiente y segura.
Una vez que se desencadena el parto, la oxitocina estimula contracciones rítmicas que ayudan a dilatar el cuello uterino. Cada contracción ejerce presión sobre el bebé, facilitando su descenso a través del canal de parto. A medida que avanzan las contracciones, el cuerpo libera aún más oxitocina, creando un ciclo positivo que intensifica y coordina el trabajo de parto.
Además, la oxitocina contribuye al bienestar emocional durante el parto. Está relacionada con sensaciones de conexión, calma y seguridad, lo que puede ayudar a la madre a manejar el dolor y mantener un estado emocional más estable. Por eso también se la conoce como “la hormona del amor”.
Tips y consejos importantes que puedes utilizar para fortalecer la oxitocina:
• Practica técnicas de relajación y respiración para favorecer la liberación natural de oxitocina.
• Mantén movimiento durante el trabajo de parto caminar, balanceo, pelota 🏃🏻♀️
• Busca un ambiente tranquilo, cálido y seguro: el estrés disminuye la producción de oxitocina.
• El contacto físico y emocional con tu pareja o acompañante puede estimularla de forma natural.
• Consulta con tu médico sobre cuándo es necesario el uso de oxitocina sintética.
• Evita automedicación: la oxitocina solo debe administrarse bajo supervisión profesional.
La oxitocina es una aliada esencial en el proceso del nacimiento y el puerperio. Con una adecuada comprensión de su papel y un acompañamiento médico adecuado, es posible vivir el trabajo de parto de manera más informada, segura y conectada. Conocer cómo funciona esta hormona ayuda a que la experiencia del parto sea más consciente y positiva.
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